La Parroquia - Campillo de Dueñas

Campillanos.com
Title
Vaya al Contenido

Campillanos.com
Iglesia parroquial de Santa Catalina

Según la exhaustiva descripción realizada por D. Pedro Simón Carrascoso, cura párroco de Campillo en los años 90, la iglesia presenta una planta de cruz latina; construida en el mismo lugar donde antiguamente había una ermita. En 1726 comienzan las obras.
Parámetros exteriores de fuerte textura con esquinas de sillarejo bien emparejados y resto de piedra con relleno de mortero y calicanto sin ninguna decoración. Elemental cornisa de piedra y sencillo friso con esquinillas de ladrillo sobre el que descansa el alero.
La obra principal se termina en 1732 a falta de hacer el segundo tramo. En 1737 se construye el baptisterio y en 1797 se acomete la terminación de la torre quedando terminada en 1801.
Torre

Estructura cuadrada de 6,20 x 6,20 m.  realizada con esquinas de sillarejo y pared de piedra y mortero. Cada plano de la torre tiene saetera y sirve para dar luz a la escalera interior, excepto en el plano que da al tejado. Un vano por fachada en la parte superior donde se ubican las campanas, excepto en la tronera que da al este que no posee campana.
Culmina este alzado con un amago de tejadillo en el que se sitúa un monolito pétreo en cada una de las esquinas. A partir de aquí nace una pequeña torre octogonal, a modo de cimborrio, construido en cantería de sillares engastados con vanos en todas las caras.
Culmina la torre en un chapitel rematado por veleta y cruz.
Portada

De pilares estriados adosados a la pared con sencilla basa, rematados en frontón de media naranja truncado en dos rosetones de piedra. Arco de medio punto. Decoración muy elemental.

Interior

Lo compone una gran nave cubierta por una elevada bóveda de cañón apeada en muros al interior con columnas de yeso estriadas, adosadas a la pared que fingen sostener algo. Sobre estas columnas descansa un capitel estucado con gran profusión decorativa, sobresaliendo angelotes en posición de escorzo, cabezas de caballos alados y carnosos vegetales.
Cúpula radiada con decoración estucada apoyada sobre pechinas (trompas). Preside la cúpula un angelote de tamaño humano que parece sostenido en el aire.
Interior cubierto de grandes retablos dorados, cuyo brillo destaca enormemente sobre las paredes pintadas.
Altar Mayor

Estilo barroco escultórico, con tres calles y tres pisos. En 1743 se adjudicó la obra a Miguel Erber, maestro escultor, natural de Bello, por la cantidad de 14.000 reales. La obra quedó terminada en 1746. El dorado se realizó en 1779 y el coste asciende a 17.000 reales.

Piso 1º: Grandes angelotes sostienen sobre sus espaldas la basa sobre la que se asienta San Pedro y San Pablo. En la calle central sagrario y tabernáculo que en su frente, con una puerta corrediza representa a Cristo glorioso en una escultura policromada.

Piso 2º: En los extremos de la calle central dos columnas salomónicas (helicoidales) con decoración vegetal en el piso central y gran hornacina que contiene la imagen de Santa Catalina, titular de la parroquia. En las calles laterales del segundo piso dos columnas abombadas estriadas con decoración adosada. Entre las columnas salomónicas y abombadas, sobre pedestal, imágenes de San José y San Juan Bautista.

Piso 3º: En las calles laterales comienza un arco de medio punto, truncado por dos columnas salomónicas y otras dos abombadas. En la calle central escultura del Arcángel San Miguel desafiando el poder del maligno.

Por todo el retablo angelotes alados debajo de los soportes y mucha decoración, sobre todo vegetal, muy típica del estilo barroco.
Altar de la Virgen del Rosario

De forma casi generalizada se ha tenido la idea que este retablo era el más antiguo que poseía la iglesia parroquial ya que servía de Altar Mayor de la antigua ermita donde solamente había (que se sepa) dos retablos. El otro era el del Santo Cristo y en su libro de la Cofradía nos dice que es anterior al de la Virgen del Rosario.
Sin lugar a dudas estamos ante un retablo de gran valor. Observándolo detenidamente encontramos multitud de figurillas humanas policromadas, repartidas por todo el retablo.
De estilo plateresco, tiene dos pisos y tres calles. En el centro del primer piso, se encuentra el sagrario, en cuya puerta está representado Cristo Resucitado, en relieve. A cada lado de la puerta del sagrario, una columna salomónica con incrustaciones vegetales y animales. Sobre dichas columnas destaca el entablamento. Cornisa ajedrezada. Sobre el arquitrabe quiere comenzar un frontón que tiene disposición curva (acaracolada). A ambos lados del sagrario encontramos representaciones pictóricas, sobre lienzo, de dominicos.
En el segundo piso, en hornacina, espléndida talla policromada de la Virgen del Rosario. A ambos lados hay columnas que en sus 2/3 son estriadas y el resto lisas. En su parte lisa, en relieve y policromadas, representaciones humanas que transpiran dolor. Sólo las dos columnas centrales, en su parte estriada, tiene representaciones humanas. Las cuatro columnas terminas en un capitel jónico; en la de los extremos el capitel parece deformado. A ambos lados de la hornacina representaciones pictóricas de dominicos sobre lienzo.
Remata el altar una espadaña, con hornacina, que contiene la talla de San Vicente Ferrer. A ambos lados de la espadaña, en su base, orejeras. Por todo el retablo, en sus partes más lisas, se representa el busto de angelotes, calaveras y personajes raros, a veces espantosos y absurdos, que parecen salidos de la mitología griega o latina y que en algunas de sus posiciones parecen guardar un equilibrio arriesgado.
A la derecha de la Virgen del Rosario podemos ver a San Jacinto y a la izquierda a Santo Domingo de Guzmán. En el primer piso a ambos lados del sagrario, podemos ver a San Pedro de Verona y Santo Tomas de Aquino.
Altar del Santo Cristo

Altar de un solo cuerpo, rematado en un frontón truncado de donde parte una espadaña en la cual hay una hornacina donde se ubica la talla de Santa Lucía. La espadaña posee orejeras en los lados.
Cuerpo central de doble basamento con columna abombada y adosada. Tiene carácter meramente decorativo. El capitel es corintio policromado. En el centro del arquitrabe se encuentra un medallón en cuyo frente aparece la imagen del Santo Sudario.
El centro del retablo lo ocupa una gran talla del Cristo crucificado de tamaño humano. A ambos lados dos pequeñas tallas de San Juan y la Virgen. En el fondo, representación pictórica del infierno, en lo alto la Virgen del Carmen y San Antonio parecen tener compasión de los condenados. Posee un arco carpanel con medallones en el intradós. En los medallones del arco aparecen las llagas, y en los laterales diversos instrumentos empleados en la pasión y crucifixión.
Altar de San Antonio de Padua

Altar barroco policromado de tres cuerpos. En el primer cuerpo, hornacina donde se ubica la talla del Niño de la bola. En los extremos dos ángeles parecen sujetar sendas columnas del otro cuerpo. Estos ángeles sirven de basamento cual si fueran pequeños atlantes.
En el segundo cuerpo, en la parte central, una hornacina alberga la imagen de San Antonio. En los extremos se encuentran dos columnas salomónicas con decoración vegetal y animal adosada. El capitel es mixto. A los lados de las columnas, estípites truncados con capitel jónico-corintio.
En el tercer cuerpo, hornacina central presidida por Santa Bárbara. A ambos lados columnas lisas abombadas con decoración adosada.
Altar de San Francisco Javier y San Isidro

Altar barroco policromado de tres cuerpos.
En el primer cuerpo, hornacina donde se ubica la talla de la Virgen del Carmen. En los extremos dos ángeles parecen sujetar sendas columnas del otro cuerpo.
En el segundo cuerpo, en la parte central, una gran hornacina contiene la imagen de San Isidro. De los extremos de la hornacina parten dos molduras a modo de cimacio. Su función es meramente ornamental y decorativa. En los extremos se encuentran dos columnas estriadas y abombadas corintias, de base sencilla y con motivos vegetales adosados. A los lados de las columnas, estópeles truncados con capitel corintio-jónico.
En el tercer cuerpo, hornacina central presidida por San Francisco Javier. A ambos lados columnas estriadas en 1/3 y lisas, y decoradas en el resto. Son abombadas y en los extremos orejeras.

Altares de San José y La Asunción

Ambos retablos son de idéntica factura. De estilo neoclásico. Espléndidas columnas de fuste liso con basamento normal. Capitel corintio calicular. Preside el centro del retablo un cuadro lienzo en el que se representa la muerte de San José en uno y en el otro la representación de la Asunción.
Arquitrabe, friso corrido y cornisa ajedrezada. El entablamento sujeta un cuerpo con dos pilastras adosadas, estriadas, cuya función es meramente decorativa. A los lados orejeras.
En lo alto un frontón clásico rematado en nimbo triangular con decoración radial.
San Roque

Talla policromada de 108 cm de altura y 47 cm de anchura en su base.
El órgano

En 1784 la iglesia luce un aspecto imponente, su construcción es reciente, los retablos mayor y laterales están terminados y lucen un dorado espectacular, ya solo falta la guinda y esta va a ser el órgano, instrumento que realzara las celebraciones e infundirá un mayor grado de armonía al conjunto.

El 26 de mayo de 1784 D. Agustín de Cámara en nombre de Francisco Lopez vecino y mayordomo de la iglesia del lugar de Campillo anejo del de Tortuera; ante vmd. parezco y digo que dicha iglesia por su fábrica es una de las buenas que ay en el obispado y por ello sus vecinos desean con ansia y pª la mayor decencia un órgano nuevo y pª ello mi parte a consexo del cura ha tratado con Francº Turull maestro de la facultad vecino de Zaragoza por quien se ha hecho plan que presento y dice lo egecutara en la cantidad de 10.500 rs. sin que sea visto pedir mejora alguna aunque la hiciese, y siendo como es dicho mro. experimentado, y lo acreditan los que ha hecho en este obispado y otros fuera de el y teniendo la fábrica suficientes caudales pª ello y gastos ordinarios sin lo que esta pª caer en su atención.

Así se cuenta en documento inédito cedido por D. Juan Antonio Marco.

Regreso al contenido